Escucha a la mujer gritar mientras se tiran las cuerdas, presencia un masoquismo severo, juguetes que en realidad son cabellos. Esta categoría explora el atractivo masturbatorio de jalar el cabello, que permanece como una de las formas más provocativas de restringir los deseos. Habrá ejemplos brillantes de parejas metiéndose en esta curiosidad con toques curiosos, empujones excitados y sacudidas furiosas. Los siguientes videos son bastante crudos y reales al retratar este kink erótico y los sonidos que produce, incluyendo los jadeos, gemidos e incluso lágrimas de alegría. Es un mundo en el que las distinciones entre disfrute y sufrimiento son irrelevantes y lo único que uno tiene que hacer es ceder a la emoción